El edificio del Hospital de Santa Cruz (Chile) ya tenía sus buenos años, de modo que la noticia de su remodelación y reconstrucción fue muy positiva.
Por supuesto, nadie podía saber lo que iba a suceder apenas se iniciaron las obras: dos extrañas apariciones se dieron cita en el lugar, vaya uno a saber de qué forma convocadas.
La primera de ellas era el fantasma de una niña. Vestida de blanco por entero, la pequeña recorre por la noche las salas del hospital. Es llamada "la niña de los martes", pues sólo es vista ese día de la semana.
Al parecer, se limita a observar a todos sin causar ningún daño, desapareciendo luego tan de golpe como aparece.
Distinto es el caso de la segunda aparición: un sacerdote muy anciano, de sotana blanca.
Esta figura, con un rosario en sus manos, aparece muy cada tanto pero nadie desea verla.
El motivo es que se presenta ante un enfermo en particular cada vez, dándole una extraña bendición y "sentenciándolo" al mismo tiempo, pues a los pocos días la persona fallece.
Ni los empleados del hospital ni los obreros que trabajan en el nuevo edificio desean hablar demasiado del asunto. Apenas un empleado con muchos años en el lugar accedió a ser entrevistado por un periódico local.
Su teoría (que puede ser tan buena como la de cualquier otro) es que, tanto la niña como el sacerdote, son fantasmas de personas que fallecieron en el hospital en tiempos muy lejanos.
Supone que la niña busca a alguien en particular, que no puede encontrar.
En cuanto al curita, no quiere ni mencionarlo. No sea cosa que lo "bendiga".
Así como ven en la figura que antecede, quedará el nuevo Hospital de Santa Cruz una vez que esté finalizado por completo. Quizás entonces cesen los fenómenos extraños.
9 comentarios:
Hola Pelado,porque sera que siempre que hay hospitales,siempre hay algo misterioso o de terror en el medio??,me acuerdo de un monton de peliculas,te acordas de Coma???,la verdad que una camara mostrando algun pasillo vacio de un hospital da un poco de miedito,no??un besito.-
PAh...
vos sabes que el caso que me deja asi ... cumpungido, madio medio .. es el de la niña.
Al cura, si lo encuentro, directamente le hago la cruz :)
o quizá sigan apareciendo, en un intento de hacer comprender que un cambio estético no les cambiará lo que vivieron...
un besotote para tí mi Pelaíto, que tengas un muy feliz inicio de semana!!
p.d.: jahaajajaja! me parto con Mariolo!
ah mi Pelaíto, si te gustan las historias de fantasmas y hospitales, te recomiendo la lectura de 'El hospital de los fantasmas' precisamente, de Senno Knife, manga. Un tanto macabrísimo y un bastante gore, pero a Knife se le perdona :)
Pinchita:
Creo que los hospitales son buenos como marco para novelas y películas de terror, porque son lugares de indefensión para los seres humanos.
Y tenés razón: ¡qué buena era "Coma"!!!! (como para mirar a los médicos de costado, jajajajaja)
Besos.
Mariolo:
Yo voy a lo práctico: fantasma o no, al cura le daría un fierrazo!!
(O dos)
Mary:
Habría que ver si el nuevo edificio tiene "Sala fantasmal", jajajaja.
Creo que no, porque la modernidad tiene sus límites.
Voy a seguir tu consejo con ese autor (mismas iniciales de Stephen King).
Besote.
Muy interesante Pelado....cura fantasma, un fantasma de cura, si los hay y no solo alli, aca hay uno que llego a obispo de Montevideo je
Jajajjaja, cierto, Ferchu, muy cierto, jjajajajaa.
Y tampoco me gustaría que ese "fantasma" me diera su bendición, jajajjaja.
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